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Los 10 mandamientos (Del joven arquitecto)

  • Foto del escritor: Ignacio Sottini
    Ignacio Sottini
  • 28 may 2017
  • 8 Min. de lectura

Egresado o estudiante, siempre hubo reglas implícitas que sabíamos que debíamos obedecer aunque nadie las hubiese dicho en ningún momento. Eran reglas que todos debían cumplir de forma regular pero que más de una vez, estos mandamientos divinos, eran rotos de forma continua por nosotros mismos y por nuestros pares. Pero, ¿Cuales son estos mandamientos? ¿Cuales son estos lineamientos que todo arquitecto debería seguir?

1 HONRAR LA COMPUTADORA Y NO MALDECIRLA EN VANO

Todos sabemos lo que la tecnología significa para los arquitectos, no hay necesidad de fingir lo contrario. También es de público conocimiento el cariño, el capital y el tiempo dedicado a la computadora y lo que ésta nos posibilita o nos brinda. Más que un mero instrumento indispensable de trabajo, la computadora se convierte en aliada, y como tal, hay que tratarla de forma correspondiente. Entonces surge la pregunta, ¿Por qué maldecirla cuando se pone lenta o un programa deja de responder inesperadamente? ¿Acaso no tiene suficiente presión de ser la responsable de canalizar nuestras ideas de forma gráfica para poder expresarnos? ¿Por qué darle una responsabilidad más? Es injusto para ellas. Y por sobre todas las cosas, la presión no funciona bien en ellas. Son como niños que cuando los presionas tienen esos explosivos ataques de histeria que no responden absolutamente a nada y luego cuando pasa la tormenta todo vuelve a la normalidad por lo que, respeta a tu aliada y más que nada, cuídala.



2 NO USARÁS EL AUTOCAD PARA PROYECTAR

Imagen cortesía de Wall Street Journal

Tanto amado como odiado, no hay forma de negar que el AutoCAD sigue siendo y será durante varias décadas el programa predeterminado por excelencia para realizar los dibujos técnicos necesarios con una rigurosidad y un nivel de detalle aun inalcanzable para otros software. Y si bien sabemos las cosas maravillosas que un arquitecto y el programa pueden construir, se consideraría casi un sacrilegio utilizarlo como hoja de bocetos.


Siendo duro, primitivo y elemental, AutoCAD sirve más para una pasada en limpio de nuestras ideas y nuestros bocetos, para poner medidas y rigurosidades y corregir errores o falencias de mediciones o dimensiones. Nadie debería, en su sano juicio, utilizar una herramienta tan estática y poco predictiva como AutoCAD para sus primeras líneas de proyecto. Y esto es por la simple razón de que en este mundo tan sensibilizado con la tecnología, para los arquitectos nada va a superar como primer instancia un trozo de papel y un lápiz o birome. Una servilleta servirá, una fibra de color también. Pero la sensibilidad es diferente, el trazo también lo es y así también la fluidez y la plasticidad del trabajo. El ser humano está lejos de lograr reemplazar por completo la practicidad de agarrar un trozo de papel y una birome para comenzar a bocetar sus ideas arquitectónicas.

3 NO SUBESTIMARÁS EL TIEMPO QUE LLEVARÁ UNA ENTREGA

Imagen cortesía de Architizier

Ya lo nombré anteriormente en Maestros del Tiempo (NO) y lo volveré a nombrar ahora: Los arquitectos somos pésimos manejando tiempos y deadlines. Este punto es fácil de relatar y de sentirse identificado, así como también de explicarlo.


Lleva un tiempo organizar una entrega de forma correspondiente para saber qué cantidad de piezas hacen falta, cual es el nivel de detalle que cada una de ellas requiere y quien se encargará de cada una de ella si se trata de un trabajo en equipo. Pero, luego de la organización de enumerar y detallar cada tarea viene una de las tareas más difícil: Estimar el tiempo que llevará cada una y maniobrar las horas de trabajo hasta el momento de la entrega.


¿Un render está tardando más de lo que tiene que tardar? ¿El hatch de AutoCAD no responde? ¿Photoshop se está demorando demasiado en guardar un archivo? A todo esto yo lo llamo gajes del oficio, cosas que uno ya debería estar acostumbrado siendo profesionales con un amplio manejo de tecnología. Así como estimamos el tiempo concreto que podría llevarnos una tarea, también es necesario estimar un porcentaje más por si algo no sale como lo esperábamos. Siempre tener un plan B y siempre estar más delante de la circunstancia.


De otra forma, ¿Cómo diseñaríamos correctamente el futuro si no podemos diseñar el tiempo que nos llevará una entrega?


4 NO DUDARÁS EN PONER CUALQUIER PLAYLIST EN LARGAS HORAS DE TRABAJO

Imagen cortesía de Life of An Architect


Es hermoso ese momento matutino donde, luego de servirte una gran taza de café, te sientas frente al trabajo, lápiz o mouse en mano y tu cabeza comienza a carburar mientras terminas de desperezarte en la oficina sin que tu jefe te vea demasiado cansado. Es el momento en que decides poner en la aplicación que prefieras esa canción que te estuvo persiguiendo la cabeza por varios días, y la pones dos o tres veces más por si acaso. Y luego terminas escuchando el álbum del artista y de los artistas relacionados. Pero… ¿Qué estás escuchando cuando ya pasaron las cuatro de la tarde? ¿Las siete? ¿Siquiera lo sabes?


Es probable que se trate de una playlist con los mejores compilados de los 80, soundtracks de películas épicas o las vergonzosas canciones de tu niñez y de hasta los programas preferidos cuando la mejor forma de escuchar música era poner la radio o la televisión. ¿Quién puede juzgarte? Podemos ser grandes maestros de los bloques de autocad o de los atajos de Photoshop pero jamás podremos ser buenos djs de festivales o eventos de largas duración. La playlist que podemos llegar a armar no durará más de una hora y lo que venga después de eso debe ser escuchada por oídos de mentes abiertas.

5 SANTIFICARÁS LOS DELIVERIES

Imagen cortesía de The Loop


Una cosa lleva a la otra. No tienes tiempo de calcular el tiempo que llevará un render, no tienes tiempo de dormir y ni siquiera tienes tiempo de elegir una playlist decente para escuchar en esas largas jornadas de trabajo. ¿Quién puede llegar a tener tiempo de prepararse un rico menú nutritivo todos los días de tu vida para seguir una dieta balanceada? Muy pocos, y aquellos que lo hacen seguramente deberán sacrificar otras cosas.


Bajas la mirada a tu barriga, a esa que, conforme o no, desearías que no aumentara de tamaño, resoplas cansado y miras el teléfono de los deliveries más cercanos, el que tenga mayor descuento o promoción o ese que hace semanas que ni siquiera te atreves a nombrar por mantener una dieta balanceada.


No digo que esto sea cosa de todos los días, no quiero fomentar a que nadie lo haga tampoco. Yo personalmente no soy fan de cocinar, soy más de los que te invitan a casa para ser digno de una buena comida mientras que yo te ofrezco encargarme de lavar todos los platos. Pero, en esos momentos en que caemos en la debilidad de marcar el número de teléfono para pedir eso, ¿Acaso no somos felices? Inclusive antes de terminar el pedido saboreamos en nuestro paladar lo que vendrá en tal vez cuarenta minutos.

6 NO COPIARÁS MEMORIAS DESCRIPTIVAS USADAS ANTERIORMENTE


Imagen cortesía de Architizier


Dependiendo el campo de la arquitectura en el que trabajemos, puede que una que otra vez nos toque explicar de forma sintética, concisa y real nuestro proyecto arquitectónico para que hable por nosotros, ya sea porque el cliente lo leerá en su casa, porque se trata de un concurso anónimo o una entrega de un trabajo facultativo.


Lo cierto es que todos en algún momento nos tuvimos que sentar frente al procesador de textos viendo como el cursor parpadeaba esperando a que escribiéramos la razón por la que decidimos hacer ese proyecto y ahí es cuando ¡Pop! Crtl+c; Ctrl+V, unas cuantas modificaciones y la memoria descriptiva de un proyecto anterior se convirtió en la del proyecto actual.


Error. Grave error.


No solo que atentaría contra nuestra propia capacidad de creación el no escribir una simple memoria descriptiva sino que además no nos estaríamos permitiendo a nosotros mismos volvernos críticos de nuestro trabajo en una manera concisa y objetiva. Nos limitaríamos a cambiar meras palabras que en el contexto quedarían bien pero en la intención no. Y creeme, una memoria descriptiva adaptada es tan visible como la intención del autor.


7 NO LEVANTARÁS FALSAS MEDIDAS EN PLANTAS Y CORTES

Imagen cortesía de Pinterest


Es común estar en esa situación de saber que necesitamos cierta cantidad de metros cuadrados para una habitación pero simplemente las medidas están ligeramente por debajo de esa operación matemática. O tal vez estar en la situación inversa, donde después de pasar días y noches trabajando en un proyecto para que podamos resolver todo el programa descubramos que el terreno en realidad tenía varios metros menos de largo o de ancho.


Muchos achican bloques para simular tener espacios más amplios, otros se limitan a mentir el tamaño de las salas sin alterar de manera correspondiente las proporciones y otros “maquillan” el terreno, haciéndolo mucho más grande de lo que en realidad es. Y luego viene el render, y luego viene la intención de hacer una comparación satelital del antes y el después y la mentira queda a la vista de todos. ¿Acaso en el proyecto arquitectónico también estaba incluido la modificación catastral del terreno y el ancho de las calles?


Esas mentiras, pequeñas mentiritas piadosas, van acumulándose hasta el momento esperado en que finalmente ganamos un concurso público, nuestra obra se concretará y nosotros nos encargamos de la dirección técnica para darnos cuenta de que en realidad el terreno no se modifica a nuestro antojo y semejanza sino es el proyecto que termina teniendo varios metros menos, salas inútiles o espacios que parecen mal pensados por no ser fiel desde un comienzo.


8 NO CODICIARÁS ÉXITOS AJENOS


Imagen cortesía de Architecture Policies


Tú y tu grupo de colegas se presentaron a un concurso nacional y no obtuvieron el primero premio pero si una honorable mención honorífica. Otro grupo de arquitectos, entre ellos alguien que tú conoces y no te agrada mucho, sacó el primer premio y orgullosos se andan pavoneando en la presentación.


¿Qué es ese sentimiento que sientes en tu estómago? Sientes que tu propuesta fue mejor, que tu supiste resolver mucho mejor la problemática planteada y que sin lugar a dudas la presentación tuya fue superior. O tal vez no, tal vez sabes que lo que el otro equipo hizo era espléndido pero aun así querías haber ganado. Ese sentimiento que sientes en tu estómago es algo muy común en un ambiente tan competitivo como la arquitectura y es la raíz de muchas discusiones y problemas: Tu ego siendo herido.


Así como a ti no te gustaría que otros colegas te miraran de manera poco agraciada cuando tú ganes algo y ellos no, siempre hay que comportarse de forma decorosa y amable. Al fin y al cabo, no es su culpa que hayan elegido el proyecto. De seguro hay un millón de razones por las que un proyecto priorizó sobre otro y no siempre está relacionado a la resolución explícita de un programa definido.


9 HONRAR LA DISTRIBUCIÓN DE TAREAS GRUPALES

Imagen cortesía de Life of An Architect


Más de una vez, si no es siempre, trabajarás en equipo con colegas para abordar un problema grande, un programa complicado o un set de casas a renderizar lo antes posible. Claro que si bien es una tarea en conjunto que todos deben reaccionar como un órgano, no hay nada mejor que sentir la tranquilidad de saber que tú serás el encargado de una parte específica.


Así como en una orquesta todos los miembros son igual de importantes por las diferentes tareas que cumplen, los miembros de un equipo de arquitectura deben sentirse de la misma forma. Y créeme, es una tranquilidad saber que tú eres el encargado de una parte específica.


No hay nada mejor que eso en trabajos grupales, significa la síntesis de la conexión y la confianza. Y significa que, si bien cada uno trabaja en su área, no hay que descuidarse del todo pero tampoco convertirse en una suricata que lo único que hace es estirar el cuello para ver qué están haciendo los demás.


10 NO PREVALECERÁS DIOSES AJENOS A LOS MAESTROS MODERNOS

Imagen cortesía de Cosas de Arquitectos


Ámalos u ódialos, admíralos o aborrécelos, pero los grandes maestros modernos marcaron un antes y un después en la arquitectura y seguramente tú no tendrías la formación de la que te jactas tanto de tener si no fuese por ello.


Hay para todos los gustos, y si bien personalmente yo me inclinaré siempre por Mies, los demás son igual de meritorios de recibir ese título y dignos de estudio y análisis, pero no siempre admiración.


Todo arquitecto que se jacte de tener una formación adecuada debe conocer a todos, debe haber analizado a todos y debe admirar a todos, pues estos sujetos fueron capaces de no solo ser visionarios en su época sino marcar los cánones con los que la arquitectura se pensaría desde entonces.


Puede que tu ejemplo máximo en este momento sea Calatrava, MVRDV o Koolhas, pero debes saber el origen de la arquitectura posmoderna, y es la arquitectura moderna y sus grandiosos exponentes.



¿Que mandamiento piensas que faltó? ¿Cual de estos quebraste una y otra vez?


 
 
 

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